Aquí Laguna.

¡Boomerang!  Tal efecto, dicen está más que anticipado, con la ya abierta confrontación que se cierne, segun perciben los expertos y no tanto, del devenir que genere este  singular desencuentro, sobre la clase política lagunera toda, en especial la tricolor, y en la que ya está también incluída la de MORENA, cual «mano de gato» sacando las castañas del fuego, con la  denuncia que el Senador Luis Fernando Salazar Fernandez -mala yerba, siempre en descomposición-, interpuso y obtuvo expedita respuesta, ante la Unidad de Inteligencia Financiera, institución, que en el pasado régimen federal, fungiera, allá por la Edad Media, en su caceria de brujas, cual «martillo de las brujas» para descabezar o inutilizar a todo aquel a quien le pusiera el ojo encima el entonces Presidente Andrés López Obrador, sin que se conozca a la fecha,  los resultados tangibles que en materia de combate a la corrupción haya alcanzado en especial en los ámbitos de la delincuencia organizada, es decir, de los grandes consorcios delictivos que han dado a nuestro país, triste prominencia internacional.

Este fin de semana, en medio de rumores no confirmados, pero si persistentes, de que hacían ya incursiones de representantes de la UIF sobre la Dirección de SIMAS-Torreón,  toda vez que la documentación del contrato en el que el ex panista  finca su denuncia, que dicen, le fue  filtrado por algunos «topos» de los ya muchos enquistados al interior de la actual administración municipal, y ésta paramunicipal, documento que apenas fuera formado el pasado mes de diciembre, en la víspera del término de la pasada administración municipal, por el hoy Contralor y no por quien es hoy su Director en funciones dicen,  pero en fin, la investigación deberá poner a todos en su lugar, si bien el objetivo no es ir sobre éste último sino por algunos  personajes como lo son el propio alcalde Román Alberto  Cepeda González, y su Secretario del Ayuntamiento José Elías Ganem, el primero, por ser quien preside el Consejo de Administración de SIMAS Torreón, Consejo que con todo sus integrantes son corresponsables del caso, y de Ganem por ser a quien se le imputa -lo que debe probarse-, ser quien utilizara una empresa fantasma para alzarse con el contrato bajo sospechas, realizar los trabajos de conservación y mantenimiento de los pozos que conforman la red de abasto y distribucioón de agua a la población, amen que con este caso, Luis Fernando trata de volverla a hacer, es decir, montado en denuncias que explota mediáticamente, con estridencia y alzarse como el heroe impoluto del momento, pues no conoce otro método como el sujeto político que es, buscando encontrar asi la llave que le abra la puerta para ser de nueva cuenta el candidato a la presidencia de este municipio, si logra superar los escollos que MORENA y otros aspirantes de igual color, se le atraviesen. Y se recuerda   la denuncia que junto con lideres del PAN,  en el que militaba el hoy izquierdista en contra de Humberto Moreira y cuyo saldo final resultó que fue a dar no a Coahuila, sino a los bolsillos del régimen de AMLO, donde quedaron convertidos en agua de borrajas.

Otro asunto lo constituye las demandas que se dice, tiene interpuesto a la Auditoría Superior de Hacienda en Coahuila versus actuaciones no solventadas por la Tesorería del municipio de Torreón a cargo del Contador Oscar Luján Fernández, asunto «del que no fue enterado» el vitriólico diputado plurinominal Antonio Atollini Murra, lo que lo tiene al borde de la histeria, pues en materia de «denuncias» se lo llevó ya de encuentro su antiguo guía Fernando Salazar Fernández, luego que el hombre del babero -kufiya-, al  optar por irse a refugiar bajo las enaguas de «la infanta» Cecilia Guadiana es decir, de la contrincante de Salazar Fernández, por lo que  le puso a éste ultimo visible distancia. En esas anda, en tanto la primera línea de defensa del alcalde torreonses, lucen más que desconcertados, pues apenas, dubitativo hace la defensa de su administración el diputado Felipe González, y  hoy «sacó la cabeza» el primer regidor Luis Cuerda Serna, para recibir ipso facto, los picotazos de Atollini Murra, que no quiere perder tal presa.

También notable, el silencio que invade a la dirigencia local del priismo, que poco o nada se arrima a fortalecer con acciones  y también declaraciones, pues la guerra tambien es mediática, con todo y que tiene Fuero, la diputada Verónica Martínez, silencio o prudencia, según sea el caso, toda vez que en mentideros políticos la ubican ya como presunta sucesora emergente del actual alcalde, de abandonar, como se insiste y él rechaza, la intención de abandonar el  cargo que desempeña por simples «motivos de salud», no se sabe si por ser su salud física o simplemente su salud política que luce más que quebrantada por la inclemente, poco profesional embestida mediática que no oculta  origen. Ooootro caso lo representa los grupos empresariales ligados orgánicamente al destino municipal, en especial el del gremio de los contratistas tradicionales de la obra pública -esos que tan bien coucheaba, el ahora Morenista Ingeniero-, si bien tradicionalmente saben que el silencio es el secreto de su  supervivencia, resulta que ya empezaron a ser incluidos en las listados de sujetos «a investigar», por «sobrecostos en algunas obras municipales» eso sin duda tendrá efectos demoledores.

Y que decir del escudo mediático, que involucra un alto costo de inversión, no solo en pago a Medios y demás yerbas, sino al mismo aparato interno que se ve, más que rebasado, cuando se conoce ya, que a su titular, se le resta eficacia cuando su presencia y operación es rechazada por parte del principal Medio de Comunicación regional, en cualquier tipo de gestión, de ello, hay que preguntar lo que tuvo que pasar y digerir, Juan Adolfo Von Bertrab, hace unos días.

En  tanto, el mundo sigue su marcha, viviendo Torreón singular etapa de desarrollo y un autentico boom en materia de inversión inmobiliaria, incluso implementando su crecimiento vertical, que acapara por ahora, la inversión foránea, que ven en tal tema, un nicho de oportunidad a pesar del clima económico de incertidumbre que priva en otros giros de inversión en el pais. En este rubro y del ámbito de la inversión local, de parte, dicen según rumores de los del bolsillo de Hassan Manzur Nuñez, que ha ido adquiriendo innumerables edificios viejosos y viejas instalaciones que se ubican en lo que se considera el perímetro del Centro Histórico de la Ciudad, con el objetivo de su rehabilitación con fines estrictamente económicos, pero que pasan por el rescate de tal patrimonio, cual símil de lo que en la Ciudad de México hiciera el magnate Carlos Slim allá por los años 90’s, para alcanzar su rescate y en el que se invirtieron 4,500 millones de pesos de aquellos.

Se desconoce si en el proyecto de Manzur también estén o vaya a estar recursos públicos, como lo fue el de la capital, que contó con la voluntad política de AMLO entonces autoridad en esa  ciudad. Siendo así pues que sea, toda vez que el proyecto dicen incluye destinar a edificios hoy en el abandono su  rehabilitación para ser a arrendados para oficinas y viviendas, poblando de nueva cuenta tales lugares, que hoy lucen desolados en decadencia absoluta. Quizás mal pensados ya adivinamos la segunda intención del recién lanzado proyecto  denominado «Paseo Morelos». En fin, que todo sea para bien…

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Author: Olga Quirarte Ramírez